Una de las cualidades que tiene internet es que el acceso a la información es "euroniversal". Con esta palabra que acabo de inventar pretendo dar a entender que todo el mundo tiene acceso a la información publicada en la Red independientemente de su status social, conocimientos o nivel educativo, siempre y cuando “tenga euros” para pagar por el acceso a ella.
A consecuencia de ello pretendo profundizar el contenido de la entrada anterior en la que veíamos como Danone tuvo que defenderse de un bulo que circuló por la Red que afectaba a uno de sus productos. Como pedagogos nos debería hacer considerar que habría que potenciar en los estudiantes un espíritu crítico respecto a la información que reciben o encuentran en la Red, ya que muchos de ellos, por el simple hecho de verla, la asimilan como veraz. Y es que en el fondo es más cómodo asimilarla tal cual llega, sin profundizar en la información recibida.
Lo cierto es que el desarrollo de ese afán crítico por constatar alguna información, además de ser buena en sí misma, considero que beneficia en el desarrollo de la autoestima del propio estudiante al ser capaz en su caso de descubrir el bulo (si es que es tal) así como desarrollar su inteligencia y habilidades tecnológicas al aprender a buscar recursos en la red y distintos aspectos u opiniones sobre un mismo hecho. Además como propone "El Roto", información no asimilada, información olvidada:
Veamos algunos ejemplos.
De vez en cuando se publican en las páginas WEB de prensa o incluso en informativos televisivos, alguna noticia incompleta, no suficientemente contrastada o incluso falsa, no de forma involuntaria sino porque tal vez les asegure la atención del lector y aumente su audiencia.
Un caso que podríamos calificar de “simpático” de no ser por estar relacionado con el paso del huracán Irene por Puerto Rico en Agosto de 2011. Durante esos días una imagen circuló por la red en la que aparecía un tiburón nadando por las calles. Algunos medios se hicieron eco de ella, pero poco después se descubrió que era un fotomontaje, aunque el original es digno de ver.
Veamos otro ejemplo, relacionado con el recientemente fallecido Steve Jobs. El 26 de Agosto de 2011 el diario estadounidense TMZ publicaba una foto terrible del estado físico del brillante inventor. Poco después en algunos medios se dudaba de su veracidad acudiendo a diversos criterios técnicos. Lo cierto es que Steve Jobs falleció pocas semanas después, pero al margen de que la foto original fuera buena o no, y de que las explicaciones técnicas del segundo links sean fiables o no lo sean, lo que deberíamos hacer entender a nuestros alumnos es que nunca debemos tomar la información axiomáticamente, que siempre puede faltar a la verdad de algún modo y que deben tener ese espíritu crítico antes de dar una información por buena.
Un último ejemplo. El 25 de Octubre en un programa de televisión (“El hormiguero”) se hacía una broma -a mi juicio con buen gusto- en el que el cantante invitado Dani Martín era decapitado. El guión del programa dejaba abierta la puerta a imaginar que podría ser verdad. A partir del día siguiente comenzaron a hacerse comentarios y aportaciones en las redes sociales al respecto, y sorprendentemente hubo quien lo consideró tan real que el programa y el cantante tuvieron que aclararlo explícitamente. El Diario Montañés (un diario Cántabro) recogía el revuelo montado el día 27 de Noviembre de 2011. ¿Cómo es posible que hubiera gente que lo pudiera considerar cierto? Ya apelaba en la última entrada al sentido común, y en este caso, la propia naturaleza divertida del programa, los ensayos que se hacen, la propia ley de riesgos laborales… Javi Martín nunca estuvo expuesto a un riesgo.
Con estos ejemplos -y otros muchos y mejores- nuestros estudiantes deberían despertar una mínima suspicacia cuando reciban u obtengan información por Internet, intentar contrastarla y tener personalidad suficiente para decidir si es verdadera, bastante sostenible, sospechosa o directamente falsa.